Siempre nos colocan imágenes de ciudadanos árabes con los
colores de la guerra, del terrorismo, del fanatismo y de la marginación, como
si fuera algo ya normal. Y me refiero a la gente corriente. Antes de invadir un
país de estos para expoliarlo en todo el sentido de la palabra, nos pasan
películas de guerra en la tele para exacerbar el patriotismo, empatizar con el
héroe occidental de turno e inculcarnos
la violencia, usando la atroz técnica de animalizar al supuesto enemigo,
justificando cualquier agresión hacia él. Nos muestran tantos cuerpos
destrozados por algún que otro atentado, que ya mostramos cierta
insensibilización, y que despierta la sospecha de una reacción premeditada. Siempre
cometemos el mismo error, creer a los auténticos criminales, los que suelen
servirse de los medios de comunicación para tal efecto, los que enarbolan la
tan traída "democratización" (y que a estas alturas ya sabemos lo que
realmente esconde). ¿Les criticamos por el velo?, hay velos peores en el género
humano y "no son físicos". Señor@s, ellos también son seres humanos, ellos
también tienen nuestras mismas inquietudes, ellos también ansían la paz y la
fraternidad universales. Contemple siempre lo que nos une. Apague la tele y
tírela a la basura, y pida las responsabilidades pertinentes.
Es verdad que tenemos muchas diferencias, pero son
"estúpidamente" culturales y tradicionales, y no lo digo literal sino
figuradamente, ya que esas diferencias deberían servirnos para enriquecernos y
hermanarnos, no dejando que sirvan al elitismo como pretexto de maniobras de separación,
¿porqué debería serlo? Fíjese en esos niños sonriendo, como cualquier otro
niño, ¿qué más se le puede pedir al Universo?
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